La habitación era amplia y tranquila, lo que me permitió descansar después de un día explorando. Además, el desayuno fue un verdadero placer, variado y servido en un espacio con vistas. Sin embargo, el servicio en el restaurante fue decepcionante, donde tuvimos que esperar mucho para recibir atención, a pesar de que no había muchas mesas ocupadas. Esto afectó un poco mi experiencia, ya que la amabilidad del personal en otros lugares fue notable.

espera prolongada en restaurante|servicio poco amable

Las vistas desde la azotea durante el desayuno son impresionantes, dan ganas de quedarte ahí todo el día.

La cerradura de la puerta de la habitación tenía problemas, llegó a abrirse sola, lo que fue bastante inquietante. Además, el baño era pequeño y no ofrecía mucho espacio para los artículos de aseo. me resultaron incómodas las alfombras de los pasillos, especialmente si tienes alergias. El Wi-Fi no era muy fiable en la habitación, lo que puede ser un inconveniente para quienes dependen de internet. Esos detalles le dan un toque de descuido a la experiencia, aunque la estancia fue mayormente positiva.

La terraza del hotel era impresionante, perfecta para disfrutar del desayuno con vistas panorámicas de Nápoles y su historia, un atractivo adicional para nuestra estadía. La decoración era moderna y elegantemente cómoda, haciendo la experiencia muy placentera.

Más opciones de asientos cómodos en el área común.

Tuve una estadía agradable con buenas vistas desde la terraza y un desayuno variado y de calidad. Sin embargo, experimenté problemas con la cerradura de la puerta que generaron un poco de preocupación, y el baño resultó pequeño con falta de espacio. En general, es una buena opción para quienes deseen explorar la ciudad, pero hay detalles que podrían mejorar.

Desayuno con vistas inolvidables

La ubicación del hotel es perfecta, cerca del puerto y de la estación de metro de Toledo. Disfruté de un desayuno variado con una vista espectacular de Nápoles, sobre todo en la azotea.

Tuve un inconveniente con el Wi-Fi, que no era muy fiable en nuestra habitación. Además, la estética del baño podría beneficiarse de una reforma, ya que algunos elementos estaban un poco desgastados.

me sorprendió que en un hotel tan bonito no tuvieran asientos cómodos en el lobby. En vez de esperar a nuestro tour, tuvimos que sentarnos en las escalinatas, donde un conserje extremadamente grosero se burló de nosotros por ello. Además, la grifería está tan vieja que me sentí como en un museo de antigüedades, no en un hotel de 5 estrellas. A este ritmo, más vale pedir un trato de reyes, pero no puedo creer que me haya costado tanto.

Desayuno en la azotea con vistas espectaculares.

Las vistas desde la terraza son increíbles, pero la cerradura de la habitación falló.

Increíble! Vista espectacular desde la terraza, amabilidad excepcional del personal, habitaciones cómodas y bien decoradas.

Increíble experiencia con vistas espectaculares!

Me sorprendió el gran servicio del personal, siempre dispuesto a ayudar y hacer que te sientas como en casa. El desayuno en la terraza tenía unas vistas de Nápoles que no podía creer, además de ser muy variado y delicioso. Solo que la señal del Wi-Fi a veces fallaba, lo que fue un poco incómodo.

Recomiendo para parejas que buscan comodidad

Estuve ahí una semana y el servicio fue excepcional, especialmente en el restaurante, donde me atendieron como un rey. La vista desde la terraza mientras disfrutaba del desayuno era algo fuera de este mundo, realmente me hizo sentir como si estuviera en un sueño.

No fue barato, pero aceptable considerando la calidad.

Estancia cómoda con algunos detalles a mejorar

El hotel está bien ubicado, con fácil acceso a todas las atracciones turísticas. La habitación era espaciosa y tranquila, ideal para descansar después de un día de exploración. Sin embargo, el servicio en el lobby fue decepcionante. una mejor atención al cliente haría la diferencia.

una estancia agradable con pequeña mejora necesaria

La ubicación del hotel es realmente excepcional, facilitando el acceso a todos los puntos turísticos. El desayuno fue un verdadero placer, con una amplia variedad de opciones frescas y deliciosas servidas en un espacio con vistas inigualables. El personal se mostró siempre dispuesto a ayudar, lo cual hizo que me sintiera bienvenido.

La cerradura de la habitación presentaba algunos problemas de funcionamiento que me generaron cierta inquietud.

El hotel tiene una vista espectacular desde la terraza del desayuno y una sala de billar genial para relajarse.

me sentí como en casa, no me puedo quejar